Y te ví despreciarme
arrancarme los ojos
pero igual
me quedé
y te vi arrepentido
de haber dicho mi nombre
de sumarme a tus planes
pero igual
me quedé
me empujaste y tirada
al costado del día
desconoci mis huesos
mi sonido
mi sangre
y no supe quien era
pero igual
me quedé
serviste el final y el café
en la taza de siempre
esta vez una sola
y dolía y sangraba
pero igual
me quedé
para poder acordarme de todo.
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